El verano ya está con nosotros en la ciudad de Nueva York. Eso significa calor, aire acondicionado y muchos maestros y empleados escolares interesados en realizarse cirugías plásticas. No tener que trabajar durante el verano es una de las maravillosas ventajas de ser un educador.
El verano también es una época de andar bastante descubiertos, por lo que las personas son más conscientes de sus cuerpos y de sus defectos. Y en reparar esas imperfecciones es de lo que me ocupo yo. Durante esta época del año, las solicitudes de Liposucción, implantes de senos y perfeccionamiento de glúteos se ponen en alza. Siempre hago abdominoplastias y tratamientos de rejuvenecimiento facial, pero estos son tratamientos que tienden a tener una demanda estable a lo largo del año.
El verano es también el momento de ser más cuidadosos con nuestra piel. El uso de productos bloqueadores solares, sombreros, y el llevar un concienzudo monitoreo de las áreas expuestas al sol, es crucial. Mi hermano falleció a causa de un melanoma, así que estoy muy al tanto de que esto representa un verdadero peligro. Háganse revisar esos lunares, amigos míos.