Halloween se trata de disfrazarse y pretender ser alguien diferente a uno mismo. Nuestras fantasías pueden -de algún modo- hacerse realidad, y el uso de máscaras confiere un cierto nivel de anonimato. Permite que nos escapemos de la realidad.

Como Cirujano Plástico Certificado encuentro que la gente viene con frecuencia a ver realizadas sus fantasías, pero de un modo más permanente. Dar nueva forma al rostro, nariz, senos, el cuerpo y los glúteos, permite una transformación física asombrosa. Estos cambios físicos pueden conducir a cambios en el nivel de confianza, en la actitud y en la personalidad.

Lo peligroso es cuando la gente siente que puede arreglar los problemas de su vida con simplemente cambiar su aspecto físico. Eso sería algo extremadamente raro. Usted sigue siendo usted mismo, solo que con mejor apariencia.

Los mejores candidatos para una cirugía plástica son aquellos que, para empezar, se sienten felices y confiados. Las mejoras físicas serían, simplemente, la cereza sobre el helado.